La vida
La vida, tan frágil, sagrada, salvaje, efímera, audaz, repentina o planificada, igual cuál es el misterio que la envuelve?
La vida,a veces la siento como un abrigo que me arropa, la hoguera en mi hogar que me calienta, y a la vez, un frío helado que estremece hasta mis venas, a veces intolerable, o fresca como una mañana inesperada de alegrías y sueños y otras tantas indomable centrarte en ella, calzar hasta su más pura profundidad, a veces llegas hasta no quererla.
La vida, inevitable que pasa y se sienta inadvertida, en momentos la amo, en otros la detesto, pero sigue siendo vida, una encrucijada permanente, un baile que parece interminable, pero que si ha de terminar.
La vida es el paréntesis, el intermedio entre dos aguas que nunca se cruzarán pero que representan el inicio y un fin, el nacimiento y la muerte, como un estado de vigilia entre esos dos eventos, ella es la estrella, es la obra maestra, es el juego, el llanto y la risa.
La vida es un pensamiento que brota entre lo real e irreal, la burla entre el espacio y el tiempo, es confusa, no sé si solo hay una o varias, no sé si es mía o es Dios, o es un invento, una fantasía, un atuendo elegante que va dejando sus hilos a cada paso, se va cansando de estar joven o se va haciendo otra vez niña en ese viaje que si llega al final la recibe eso llamado vejez.
La vida, mitad magia mitad crudeza, desafío, energía vibrante, bailarina de tensas piernas, de arco iris y tormentas, de público y aplausos, un sabor amargo junto al placer de lo dulce, un regalo, una apertura, una aventura, y definitivamente un misterio.
